
Mandatos en la Terapia de Vidas Pasadas: representación de la programación desde el subconsciente.
¿Qué son los mandatos en la TVP?
En Terapia de Vidas Pasadas hablamos de mandatos cuando nos referimos a frases, decretos o pensamientos muy potentes que se graban en nuestro inconsciente en situaciones de gran impacto emocional.
Los mandatos pueden originarse:
Durante una experiencia traumática.
Como el último pensamiento antes de morir.
Estos mandatos quedan archivados en el cuerpo mental y terminan organizando nuestro sistema de creencias del inconsciente.
Son atemporales, como lo es el alma. Por eso, permanecen activos como si acabaran de pronunciarse, sin importar cuánto tiempo haya pasado o en qué vida pasada se formularon.
En la práctica, funcionan como una programación subconsciente que nos condiciona día tras día, influyendo en nuestra forma de pensar, sentir y actuar.


Tipos de mandatos
Existen distintos orígenes de los mandatos:
1. Mandatos expresados por uno mismo
En la vida actual.
En vidas pasadas.
2. Mandatos expresados por otras personas hacia nosotros
En la vida actual:
Durante la gestación y el nacimiento (madre, médicos, entorno).
En la infancia (frases de familiares, maestros o profesores).
Durante operaciones con anestesia general (comentarios de médicos).
En vidas pasadas.
¿Cómo pierden fuerza los mandatos?
Los mandatos solo tienen efecto mientras permanecen ocultos en el subconsciente.
Cuando la persona los hace conscientes a través de la Terapia de Vidas Pasadas, pierden poder y dejan de condicionar la vida presente.


Ejemplos de mandatos
A modo de ejemplo, se muestra una lista de mandatos:
Mandatos formulados por la persona
Durante la gestación y el nacimiento
Voy a hacer todo lo necesario para que me quieran.
Me hago pequeño.
No quiero que sepan que estoy aquí.
Me quedo quieto para que no me vean.
Soy una carga para la familia.
No quiero que nadie sufra por mi culpa.
Ojalá no hubiera nacido.
Yo no pedí venir aquí.
Nadie me preguntó si quería venir.
Tengo que obedecer.
No quiero salir.
A este mundo se viene a sufrir.
Me veo en un túnel negro.
Me siento desconectado.
Mandatos sobre autoestima
No valgo para nada.
Soy un miserable.
¿Quién me va a querer siendo así?
Ojalá no hubiese nacido.
No merezco que se preocupen por mí.
No hay forma de salir de esta situación.
Nadie puede ayudarme.
No me soporto.
Mi vida es asquerosa.
Mandatos sobre amor y desamor
No volveré a entregar mi amor nunca más.
Jamás volveré a querer a nadie.
Nadie merece que le entregue mi amor.
No voy a confiar en nadie.
Nunca volveré a amar.
Nunca me van a conquistar.
Al final siempre me traicionan.
No podré retener el amor.
Es mejor no amar para no sufrir la pérdida.
Los hombres te traicionan.
Mandatos de bloqueo
No puedo hacer lo que quiero.
Estoy bloqueado.
Nada funciona.
Nunca llego a tomar una decisión.
No encuentro mi camino.
Todo lo que me propongo fracasa.
Nunca acabo mis proyectos.
Haga lo que haga, todo fracasa.
Siempre incumplo mis objetivos.
Mandatos de victimización
Nadie me escucha.
Soy un incomprendido.
No puedo defenderme.
No tengo ayuda de nadie.
No puedo hacer nada para cambiar esto.
No hay forma de evitar esta situación.
Si alguien no me ayuda, no saldré de esta.
Si alguien no me echa una mano, no me salvaré.
Mandatos de culpa (victimario)
Soy culpable.
No merezco que me quieran.
Merezco ser castigado por toda la eternidad.
Merezco todo el daño del mundo.
No tengo perdón de Dios.
Pagaré por todos mis actos.
Tengo que sentir en carne propia todo el daño que causé.
Merezco sentir el dolor que causé.
No tengo vida para pagar todo sufrimiento que causé.
Me castigaré toda la eternidad por el mal que hice.
Soy un ser despreciable.
Merezco morir.
El mundo está mejor sin mí.
No merezco ser feliz.
Mandatos expresados por terceros a la persona
Durante la gestación y la infancia
Esta es una urgencia. Hay que hacer cesárea.
No puedo más de dolor. Pónganme algo.
Eres muy malo.
Ojalá no te hubiera parido.
Así no te voy a querer.
Estás castigado y te lo mereces.
No sirves para nada.
Eres lo peor que me ha pasado.
Me has destrozado la vida.
No sirves para nada.
No lo haces bien.
Eres un perdedor.
Eres un gordo.
Eres una vergüenza para esta familia.
Tienes que esforzarte para ser el mejor.
Mira lo bien que se porta tu hermano y lo mal que lo haces tú.
Mandatos inculpatorios formulados por terceros
Te mereces lo peor.
Eres malo.
No tienes perdón.
Arderás en el infierno por toda la eternidad.
Te mereces sufrir.
Te mereces morir.
De esta no vas a salir.
Consultas presenciales en Madrid y online a todo el mundo


Regresiones del alma
Terapia de Vidas Pasadas






regresionesdelalama@hotmail.com
® Prana Soft 2025
Contacta por Whatsapp para reservar tu cita